30.12.06

¿Ese es el respeto que se tiene a los docentes? - Luis Miguel Saravia C.

El tema de la evaluación docente en mi país se ha vuelto un sainete en medio de la complejidad del problema educativo nacional. Nada sustantivo se ha dicho, por el contrario agravios y medidas desesperadas van marcando las horas y los días de este fin de año.

¿Ese es el respeto que se tiene a los docentes?

Luis Miguel Saravia C.
Lima, 30 de diciembre de 2006

Soplan vientos de fronda para los docentes peruanos. Los sucesos luego de la postergación forzada de la evaluación que debió realizarse el 21 de diciembre, nos reafirman en que la medida responde a una decisión omnímoda, antes que a una sincera reflexión y acción sobre la educación nacional.

Ante el desconcierto por la afirmación de que el 8 de enero será la evaluación –los docentes se encuentran gozando de sus vacaciones anuales- al gobierno no se le ha ocurrido la mejor idea que pagar 30 soles por gastos de movilidad a cada docente que concurra a dar la prueba.

¿Ese es el respeto que se tiene a la persona que por vocación eligió ser docente? ¿Cómo se quiere llegar a la solución del problema de la baja calidad en educación si a quien es el generador del proceso se le trata de esa manera, mejor dicho, se le compra la participación?

Este trato nos da la dimensión de lo que piensan sobre la educación quienes están en el sector y en el gobierno.

La fundamentación de la necesidad de la evaluación está respaldada por una nómina importante de estudios, investigaciones, ensayos, artículos y nadie pone en tela de juicio su aplicación. A ese nivel no está la discusión, sino en la forma cómo son tratados quienes serán evaluados. De un lado el Estado con toda su corporación no revisa su accionar sino lo endurece y oferta S/. 30.00 a los docentes que asistan a la evaluación; de otro lado el sindicato asume una posición radical con argumentos deleznables y fáciles de rebatir. Direcciones opuestas, y en el centro el educando que va sintiendo y espectando cómo sus maestros son tratados por unos que se dicen representarlos (y no los dejan hablar sino a través de sus delegados) y otros cómo el Estado, que lejos de persuadirlos, los arremete éticamente. En esta guerra de posiciones ambos bandos se olvidan de la esencia que encierra la educación. Pareciera que Delors y la Educación para Todos fueron escritos y reflexionados para ciudadanos de otros hemisferios.

Un artículo en un diario local (El Comercio, 28.12.06) analizando las últimas acciones del gobierno en estos días titulaba la columna con un “Seamos menos hipócritas”. Aplicando la reflexión es notorio y palpable que existe un doble discurso de uno y otro lado. No hay claridad en lo que se quiere. Nadie se atreve a abrir el juego y mostrar las cartas. El Proyecto Educativo Nacional que está ya presentado al gobierno, que fue acogido por el Acuerdo Nacional no debe quedarse en los almacenes (como ocurrió con Puertas Abiertas). En el Proyecto Educativo Nacional (PEN) está recogida la esencia de lo que el pueblo peruano espera para su educación. Si la primera autoridad de la Nación lo obvia en el balance de estos meses de gobierno y en lugar de ello habla de educación y competitividad (Revista Caretas Edición 1957/ 28 diciembre 2006); e ignora el PEN, qué consecuencia le puede exigir al gremio que a su saber y entender ha redactado su propio PEN en donde el corsé ideológico es manifiesto.

También el Presidente habla de la capacitación y que esta la darán las Universidades. Preguntamos ¿Cuántas están en capacidad de hacerlo?, ¿presentarán su programa de capacitación?, ¿no caeremos en un mar de temas con un centímetro de profundidad?, y la formación en Servicio que tiene planificada el Ministerio, ¿formará parte de esta capacitación? Si así lo fuere ¿desde qué enfoque se ha estructurado esta oferta? ¿Habrá tiempo para incorporar las conclusiones de la evaluación? ¿Alcanzará enero y febrero para desarrollar la capacitación?
Verborrea y facilismo oratorio, sin contenido de fondo sobre el tema.

Lo real y concreto es que con esta acción –la de otorgar 30 soles a quienes asistan a la evaluación- se vuelve atentar contra el respeto que debe tenerse al maestro. No existe voluntad política para encontrar una salida, tanto por parte del Estado como del Sindicato. El pensamiento moderno ha puesto de relieve el papel de la voluntad no sólo en el desarrollo del individuo sino también en la sociedad en su conjunto y en nuestra patria hacemos todo lo contrario. La voluntad permite dar pasos más allá de lo que indica la razón. ¿Será posible?

“Creo que para el Perú el año 2007 es el de la tierra prometida. Es un país que hace muchos años busca incansablemente, y con fe, su futuro y su promisión”, dice el Presidente (Caretas, ob.cit.). La educación en el Perú y sus docentes, nunca verán esta tierra prometida si no se dejan de lado los viejos cubileteos políticos.

Políticas sociales claras teniendo a los actores principales en la consulta permanente de las decisiones; nuevas formas de hacer política, dejando de lado “el pisco y la butifarra” de antaño, nuevas formas de enfocar el trabajo del gremio en los ejes de la defensa de la democracia, los derechos humanos en y por la educación y la justicia social. En ese marco y de una vez, si existe voluntad política explícita en educación, fortalecer la escuela pública y sus docentes con la participación de los COPARE (Consejo Participativo Regional de Educación) y la sociedad toda. Que el proceso de descentralización en educación sea el pretexto para que la voluntad política se manifieste. No empecemos el año desconociendo lo poco avanzado.

Las noticias de la noche del 29 son un claro ejemplo de cómo la posición del sindicato es irreducible y falaz. Poner condiciones es una bravata sin argumentos sólidos. “Sutep quiere participar en nueva evaluación, pero pone condiciones, fue el titular de un diario on line (Perú 21, Lima 29 de diciembre de 2006). La secretaria general del Sutep, Caridad Montes, anunció hoy que su gremio tiene la intención de acudir a la evaluación magisterial del 8 de enero, pero si el Gobierno cumple con 5 condiciones, que van desde la presencia de una comisión multisectorial que garantice la transparencia de la prueba hasta el pedido de no publicar los resultados de la misma.” Consideramos que el Sindicato de Educadores está perdiendo de vista sus objetivos y urge un aggiornamiento del sentido que tiene hoy en día la organización. Se confunde reinvidicaciones justas de orden crematístico, con lo que debe ser la construcción de una política de desempeño profesional. Son niveles diferentes que deben de una vez comprenderse.

La sociedad tiene el derecho de pedir cuentas a los responsables de esta situación: a unos por no tener claridad técnico-pedagógica ni perspectiva política en el diseño de la evaluación y a otros por ser intransigentes sinónimo de mediocridad y debilidad.

1 comentario:

Rosa María Torres del Castillo dijo...

Amigo Luis Miguel Saravia y educadores.
Tenemos ya muchas semanas dándole vuelta a esta problemática, y las posiciones parecen ser irreconciliables.Tenemos ya suficientemente puntualizados los errores y las debilidades, tanto supuestas y también las reales, de un lado y del otro lado.
Cómo quisiera salir y que salgamos de los dignósticos, de los análisis críticos, del señalamiento de los vacios, y de las "apariencias" de fuerza e hipocrecías, del mareo de las palabras contradictorias, de los ataques permanentes en toda dirección, buscar descalificarse mutuamente, de las intenciones frustradas, de los enfoques parciales.Debemos entrar ya a las propuestas de diálogo.
Pero, seguimos observando los comportamientos que separan, y sinceramente, día que pasa, en vez de encontrar entendimientos, se va cerrando el camino, y hasta la prensa desdibuja o desfigura las posibilidades y fortalezas, salvo contadas excepciones.

Las condiciones que ha señalado el SUTEP ¿son ellas, todas ellas, planteadas por puro capricho o intransigencia? ¿Tienen alguna validez? Algunas son atendibles, y otras, a discutir, y/o descartar. Todo es normalmente discutible y opinable. Y, de parte del Gobierno, diría lo mismo, como la necesidad en principio de las evaluaciones, que nadie discute, y conversar y acordar las mejores condiciones y enfoques. Debemos procurar que se acerquen y se lleguen a entender, y no contribuir a que se distancien por el bien de la educación.

¿Por qué no se reúnen? .... ¿Deberían hacerlo? ... ¿Por qué la comunicación se hace a distancia? ...y algunos otros echan más leña al fuego?. Ver los titulares de Correo y Expreso principalmente.

Pero, para reunirse debe haber un mejor clima, y el Gobierno no facilita el diálogo. Sigue atacando, y despreciando, siendo autoritario y soberbio, altivo, demagogo, cuando sabemos que ha entrado sin propuestas ni planes integrales ni en municipalización de la educación, ni en la evaluación, etc. ¿Por qué lo primero ha tenido que ser la evaluación de los maestros y no tomar en consideración las necesidades de capacitación que están en los resultados de la evaluación en servicio de los cuatro últimos años, teniendo cantidad de informes almacenados? ...
Para una evaluación docente los maestros deben participar en un clima de paz, de tranquilidad, de orden, pero de ninguna manera en tensión, discordia, o conflicto. Es un requisito indispensable! La calma no será dada por convocar a la Policía para que ponga órden!

Creo que hay que revelar ya de una vez por todas los fines últimos que no están tan escondidos: pretender hacernos creer un mesianismo salvador de la crisis de la educación por mediación publicitaria y política, imponerse pasa lo que pase, jugar su propio partido, y con sus propias reglas "ganar" a la opinión pública, que nadie le haga sombra, apoyarse en los medios y en sus primeras planas, buscar debilitar a los maestros y a su sindicato, "comprar" a los docentes para que asistan a la evaluación, y poner a sectores de los padres de familia contra ellos.
Y, la capacitación docente queda en segundo lugar!
¿Hay vocación de enfrentamiento? Todo parece convencer que no hay voluntad política para encontrar soluciones. Sólo hay acciones de fuerza. ¿Es esa una política educativa: "ganar" a como de lugar!!! Las partes deben conversar en serio.

El Gobierno en los hechos, me parece que prueba más allá de sus discursos que no cree en ningún Proyecto de Educación, ni en el del Sutep, ni en el promovido por el Consejo Nacional de Educación.
Y, el Sutep, en los hechos, ¿quiere el encuentro? ... Seguiremos los acontecimientos.

Lo deseable es -como lo he expresado en otras oportunidades- que debemos buscar ya las vías de diálogo con mediaciones oportunas, valientes, que hagan un llamado directo a las partes y que se reúnan con una agenda que ayude a construir la propuesta de entendimiento, de tareas comunes y de tareas propias de los agentes educativos.
¿Será viable? ... ¿lo inmediato ganará a las acciones de mediano y largo plazo?¿Nos escaparemos de las posturas intransigentes?
¿En dónde está la madre del cordero? ... ¡Hasta el momento sólo se escucha silencio de las entidades educativas!

José Rouillon.